Bondades del boom inmobiliario no llegan a las y los albañiles
A través de un punto de acuerdo, la diputada Vida Gómez Herrera (MC) preguntó da las el estado autoridades ¿qué pasó con el programa “Dignificar”? Y si, este programa aún existe, que den un reporte específico con cifras de lo invertido de la capacitación de los talleres y de los apoyos que se debieran estar entregando a quienes se dedican al trabajo más peligroso en México: la albañilería.
“Es inmoral minimizar sus carencias, mientras escuchamos el discurso de que Yucatán es el mejor lugar para vivir o para invertir. Las personas trabajadoras de la construcción se preguntan ¿Por qué aun con la derrama económica que hay en Yucatán su calidad de vida no mejora?”.
Por Redacción
Mérida, Yucatán, 18 octubre de 2023.- A través de un punto de acuerdo, la diputada Vida Gómez Herrera (MC) preguntó da las el estado autoridades ¿qué pasó con el programa “Dignificar”? Y si, este programa aún existe, que den un reporte específico con cifras de lo invertido de la capacitación de los talleres y de los apoyos que se debieran estar entregando.
La representación de Movimiento Ciudadano recordó que ha estado organizando una serie de parlamentos abiertos y actividades de escucha activa, con las personas que trabajan en la construcción, principalmente albañiles.
“El primero, lo realizamos en las instalaciones de este edificio y fue un ejercicio memorable, porque nunca antes en la historia reciente de Yucatán se habían abierto las puertas de este recinto para escuchar a las personas que dedican su vida a la albañilería y a otros oficios relacionados. Sí, ellas y ellos tomaron sus lugares por un día. Estas personas se dedican al trabajo más peligroso de México: la albañilería”, dijo.
Dijo que, según el INEGI, en Yucatán alrededor de 38 mil personas obreras de la construcción salen todos los días de sus casas a trabajar. El 60% trabajan en el sector informal, con todos los riesgos y las limitaciones de los derechos laborales que eso implica.
“Riesgos como son los golpes de calor, accidentes, enfermedades degenerativas e incluso la muerte, los acompañan cada día, en cada jornada laboral bajo el intenso sol de Yucatán”.
“Es inmoral minimizar sus carencias, mientras escuchamos el discurso de que Yucatán es el mejor lugar para vivir o para invertir. Las personas trabajadoras de la construcción se preguntan ¿Por qué aun con la derrama económica que hay en Yucatán su calidad de vida no mejora?”, expuso.
Es una realidad que el sector inmobiliario ha tenido un enorme crecimiento, dijo. Sin embargo, expuso que los beneficios de estas inversiones no son palpables para quienes son la mano que pone cimientos.
“Las y los albañiles de Yucatán siguen muriendo en accidentes que pueden evitarse”, dijo.
La legisladora presentó varias notas periodísticas como ejemplo de lo que todos los días sale en los medios de comunicación, en un mes, apuntó, mueren tres albañiles. Un albañil de 17 años fallece al caer de un edificio, y nuevamente, al interior del Estado otra muerte más.
“El punto de acuerdo que hoy presento les pregunta a las autoridades ¿qué pasó con el programa “Dignificar”? Y si, este programa aún existe, queremos un reporte específico con cifras de lo invertido de la capacitación de los talleres y de los apoyos que se debieran estar entregando”, mencionó.
