Exigen justicia para trabajadoras de la Facultad de Antropología UADY
Por Cecilia Abreu
Esta mañana, 13 de julio, mujeres en la Facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY) se manifestaron para exigir acceso a la justicia y reparación del daño a las trabajadoras del área administrativa y manual, víctimas de Humberto Z., a quien denuncian colectivamente por hostigamiento sexual y laboral; situación que fue denunciada también hace cinco años por otra víctima.
«Hoy se suman a la denuncia más compañeras del área manual y administrativo de la misma facultad después de haber recibido agresiones verbales, abuso de autoridad y hostigamiento sexual hacia ellas, aprovechando su actual puesto de autoridad frente a ellas», leyeron un comunicado en la manifestación.
La exigencia es clara, el cumplimiento de sus derechos, con espacios laborales libres de violencias; dicho esto, al unísono levantaron la voz para repetir una y otra vez «UADY sin acoso, UADY sin acoso…».
Entre las consignas que levantaron en carteles mostraron su apoyo a las trabajadoras con palabras como: “Yo te creo«, «¡No están solas!”, “Espacios libres de violencia sexual y laboral”, “Por una universidad libre de hostigamiento sexual y laboral”.
La representante de la organización UADY Sin Acoso, Rosa Cruz Pech, señaló que están llevando a cabo el procedimiento que indica el protocolo vigente de la universidad para atender estas denuncias; sin embargo, reiteró que ya han manifestado en diversas ocasiones que tal protocolo es revictimizante y es urgente cambiarlo.
La activista recordó que hace aproximadamente un mes presentaron una nueva propuesta de protocolo para la universidad, «el actual protocolo solo da un año para denunciar cuando eres mayor de edad, en este caso hay denuncias desde hace cinco años que en aquel momento fueron denunciadas ante las autoridades y que fue omiso, quedó impune».
Lamentó que desde ese momento las compañeras que denunciaron fueron revictimizadas, por lo que las actualizaciones del protocolo y la atención de estas denuncias es imprescindible, pues incluso hay algunas trabajadoras que temen acudir a su centro laboral derivado de la violencia ejercida por Humberto Z., acusado de las agresiones, sin que haya habido consecuencias hasta ahora.