Manifiestan sus inconformidades en las puertas del Siglo XXI, exigen detener la reforma del ISSTEY

Por Cecilia Abreu

Ayer, 24 de mayo, mientras dentro de las instalaciones del Siglo XXI docentes con larga trayectoria recibían reconocimientos por cumplir desde 30 años de servicio, parte del magisterio ya con jubilación, en unión como Movimientos Hormiga, presentaron una manifestación con pancartas y consignas para exigir un alto a la reforma del Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado de Yucatán (ISSTEY) o, por lo menos, que les escuchen.

“No necesitamos más afectaciones que las que ya nos hizo”, señaló Elmy Rosa Sosa, maestra retirada con 32 años de servicio, quien detalló que el 30 de octubre de 2019 fue la primera y, ahora, con la reforma que pretenden hacer al ISSTEY, temen que sus derechos sean afectados.

“Que hay un quebranto (en el ISSTEY), no somos responsables de este quebranto, los jubilados no nos gastamos el dinero; fueron las malas administraciones… Los únicos que tienen las armas (para denunciar) son el Gobernador del Estado y la directora del ISSTEY”.

Con la intención de ver al gobernador del Estado, Mauricio Vila Dosal, llegaron a las instalaciones, sin embargo, no les dejaron ingresar al lugar y lamentó que estuviera cercado, pues, además, aseguro que esté evento se realiza cada año desde hace mucho tiempo y jamás había sido privado y “ni cuando viene el presidente hacen esto (cerrar el paso a la gente)”.

Pidió a la diputación local que consideren sus exigencias, pues alegó que “se los vamos a cobrar en las elecciones”, ya que lo único que piden es certeza jurídica informándoles qué es lo que va a ocurrir con sus jubilaciones y pensiones, pues si les informan que esta reforma no les afecta gracias a sus derechos adquiridos, entonces detendrán sus manifestaciones.

“No queremos esta reforma”, enfatizó, pues continúan sin recibir una respuesta y ya llevan dos años pidiendo información, dijo.

Con esta reforma, detalló, la edad para jubilarse llegaría hasta 65 años, además perderán el seguro de cesantía y la pensión dejaría de ser posible a los 15 años para comenzar a ser hasta los 20.

“Otra afectación que viene, la más importante y dura, es que se jubilan en UMA’s (Unidad de Medida y Actualización), todas estas afectaciones sí son severas”; es precisamente este último su temor, pues de pagarles de esta forma, sus salarios reducirían al pasar de salarios mínimos a UMA.

Apuntó que la UMA está en 96.21 pesos, mientras que el salario mínimo en 172.82, por lo que hacer su retiro con esa diferencia es “garrafal”, desde su perspectiva; detalló que son más de 7 mil 850 personas retiradas, por lo que requieren conocer el estatus de su situación con certeza.

Lamentó que la directora del ISSTEY no les ha atendido hasta la fecha y líderes sindicales hoy, cuando les expusieron sus exigencias durante su protesta, les dijeron “que sí nos van a atender, pero quién sabe cuándo” y entraron al evento de los reconocimientos.

Aprovechó también para pedirle al magisterio en activo que no estén con ningún sindicato, “la mejor manera de demostrar tu molestia es renuncia al sindicato, le quitas el poder económico y político”.