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Profepa clausura 17 predios por deforestación en la Península de Yucatán

En Yucatán, los operativos dejaron más de 960 hectáreas de selva arrasada y maquinaria asegurada en Tekax.

Por Redacción

Mérida, Yucatán, 19 de septiembre de 2025.– La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) llevó a cabo 17 operativos de inspección entre el 15 de junio y el 31 de agosto en predios forestales de Campeche, Quintana Roo y Yucatán, con el apoyo de la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y corporaciones de seguridad estatales.

Durante estas acciones se detectaron desmontes y cambios de uso de suelo sin autorización de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), lo que derivó en la clausura de 17 predios en los que la selva fue arrasada para la siembra de monocultivos agroindustriales, principalmente por comunidades menonitas.

En Campeche, el operativo se centró en el municipio de Hopelchén, donde fueron clausurados dos predios en los ejidos Xmaben y Francisco J. Mújica, con afectaciones en 247.85 hectáreas. Además, se aseguró maquinaria pesada tipo oruga.

En Quintana Roo, la inspección se realizó en predios de José María Morelos, Bacalar y el Área de Protección de Flora y Fauna Bala’an K’aax. Ahí se detectó el cambio de uso de suelo en 2,531.12 hectáreas y se aseguró un tractor con bomba de fumigación.

En Yucatán, la Profepa clausuró predios en los ejidos Nohalal, Emiliano Zapata y Poccheil, en Tekax, con afectaciones en 968.62 hectáreas de selva. También se aseguraron una Caterpillar D8, una retroexcavadora, una perforadora de pozo y tres tractores agrícolas.

En total, los operativos resultaron en la clausura de 17 predios con daños a 3,747.59 hectáreas de selva: 247.85 en Campeche, 2,531.12 en Quintana Roo y 968.62 en Yucatán.

De mayo a agosto de este año, la Profepa ha ejecutado 25 operativos en la Península de Yucatán, con clausuras que representan 6,325.60 hectáreas de selva afectada.

Como parte de la estrategia para frenar la destrucción forestal, la dependencia convocó a la creación de una mesa de combate a la tala ilegal y la deforestación en Quintana Roo, con la participación de autoridades ambientales y de seguridad de los tres niveles de gobierno. El objetivo es detener los acelerados procesos de cambios ilegales de uso de suelo en las selvas de la entidad.

“Además de las clausuras, en todos estos casos hemos abierto procedimientos administrativos y, hasta el momento, hemos presentado 13 denuncias penales. Tenemos el compromiso de trabajar en coordinación con instituciones de los tres niveles para frenar estos desmontes ilegales y avanzar hasta obtener sanciones ejemplares para quienes arrasan con las selvas y para establecer procesos de restauración de la vegetación nativa”, explicó la procuradora federal de protección al ambiente, Mariana Boy Tamborrell.

La Procuraduría adelantó que mantendrá acciones permanentes de inspección y vigilancia en la región, con el fin de frenar las afectaciones ambientales, garantizar el cumplimiento de la legislación y procurar la reparación de los daños ocasionados a los ecosistemas forestales.

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