Exigen alto a fumigaciones que acaban con las abejas
Por Cecilia Abreu
El Colectivo de Comunidades Mayas de los Chenes se pronunució ante la muerte masiva de abejas en su región, exigiendo a las autoridades locales tomar acciones al respecto, entre ellas, prohibir la fumigación, ya que esta acaba con la especie.
Fue a través de un comunicado que se posicionaron en defensa de la vida de la especie, pues miran que su economía e identidad depende de la actividad apícola y su polinización para la milpa.
«Como hemos evidenciado en años anteriores, vivimos en el contexto de un modelo agroindustrial que devasta, destruye, envenena, comercia y contamina nuestras principales fuentes de empleo, extermina nuestras abejas y recursos naturales. Enfrentamos el crecimiento sin control de una franja agroindustnal que atraviesa la última selva maya, herencia de nuestros ancestros y legado para nuestros pueblos».
La comunidad destacó que son necesarias acciones para solucionar las afectaciones a la biodiversidad de la zona de Hopelchén, donde habitan, pues en fechas recientes en San Francisco Suc-Tuc, enfrentan «una de las «peores catástrofes ambientales documentadas en la historia de nuestro municipio, consecuencia del uso excesivo e irracional de sustancias altamente peligrosas utilizadas en los campos de cultivo presentes en nuestra región«.
Esta situación, señalaron, finalmente también impactará en la salud de las y los habitantes por la exposición crónica a plaguicidas y no solo a las abejas, por lo cual se unen de forma solidaria con la comunidad vecina y piden a las autoridades que investiguen lo sucedido, así como ordenar medidas de seguridad, correctivas y de urgente aplicación, comenzando por prohibir las fumigaciones en el municipio e iniciar procedimientos administrativos para sancionar y reparar el daño.
Explicaron que esta petición es para evitar que continúen propagándose contaminantes y generando impactos adversos, «lamentamos y condenamos que nuestros derechos humanos y como pueblo originario se encuentren por debajo de los intereses capitalistas de empresas extranjeras que han invadido nuestro territorio y afectan directamente nuestras formas de vida y desarrollo con sus semillas transgénicas y sus llamados ‘paquetes tecnológicos'».
Esta no es la primera vez que la muerte masiva de abejas y polinizadores masivos ocurre, junto con otras afectaciones que también viven en las comunidades por la fumigación, tales como la contaminación del acuífero y cuerpos de agua, pues ya habían atravesado esta situación en Hopelchén durante el 2012 y en Candelana -municipio de José María Morelos, Quintana Roo- en 2018 y 2022.
«Externamos nuestra latente preocupación por las sustancias tóxicas que son empleadas diaramente sin supervisión y control en cultivos de chile habanero, sandía, tomate y granos transgénicos. Sustancias que son vertidas al ambiente mediante aspersión mecánica y aérea ilegal generando afectaciones económicas, ambientales y a la salud de las comunidades de manera incalculable».
«Hacemos un llamado de exigencia a la prohibición de estas sustancias, la regulación y modificación de las leyes que permiten estas prácticas ecocidas, así como a iniciar una transición hacia un modelo de producción agrícola que sea más sustentable, sostenible y de bajo impacto a los medios de vida».
Su lucha, señalaron, es por la vida, el agua, los montes, la identidad como pueblo maya que resiste:
¡Exigimos la acción urgente!
¡Exigimos el respeto a nuestro desarrollo sano!
¡Exigimos un municipio libre de Agrotóxicos!
¡Exigimos la reparación de daños!