Presentarán propuesta de protocolo para la UADY, esperan aprobación
Por Cecilia Abreu
Este miércoles 14 de septiembre, presentarán la propuesta de Protocolo para la Prevención, Atención y Sanción de la Violencia Basada en el Género y Discriminación que elaboraron UADY Sin Acoso, el Centro por la Justicia, Democracia e Igualdad (Cejudi) y Unidad de Atención Sicológica, Sexológica y Educativa para el Crecimiento Personal (Unasse) al alumnado de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY).
María Paula, representante de Cejudi, recordó que hace algunos meses presentaron este mismo protocolo contra el acoso, hostigamiento y discriminación ante el Consejo Universitario y las presidencias de sociedad de alumnos para que fuera sometido a votación y, ahora, continúa en proceso de trámite sin haber sido votado; por lo cual, quieren socializar e informar sobre la propuesta para la comunidad estudiantil.
«Que puedan conocer cuál es el contenido de esta nueva propuesta, de dónde sale, cuáles son las problemáticas y áreas de oportunidad que ya identificamos en conjunto estas organizaciones para poder determinar que existe esta necesidad de un nuevo protocolo».
Fue luego de revisar el protocolo vigente de la universidad que tomaron la decisión de hacer una propuesta nueva desde cero para atender a las necesidades y nuevos retos; pues una de las principales barreras al aplicar el protocolo actual es la extensión del mismo, que tiene más de 150 cuartillas, sin lograr el objetivo de convertirse en una guía para que el estudiantado pueda acceder a un proceso.
«Deberían ser accesibles a la lectura, deben ser cortos, dirigidos a cualquier persona de la comunidad universitaria pueda acceder sin que alguien se lo interprete«. Este protocolo, al ser inaccesible desde su extensión, tampoco considera que no solamente está dirigido para estudiantes de universidad, sino también de preparatoria.
«En el caso de personas menores de 18 años, el protocolo vigente sí contempla la atención, sin embargo, encontrábamos varias disposiciones que resultaban contraproducentes e incluso podrían ser violatorias de los derechos de las adolescencias«; entre esas violaciones, señaló que el procedimiento por acoso, hostigamiento o violencia sexual dependía del consentimiento del padre, madre o tutor y muchxs adultxs preferían que las adolescentes no iniciaran el proceso por «cuidar su reputación», sin considerar que ellas quisieran proceder.
Lamentó que también hubiera imparcialidad en la aplicación del protocolo actual, por lo que decidieron que no se trataba de hacer observaciones puntuales únicamente, sino que había la necesidad de un nuevo protocolo que, además, informó, cuenta con el seguimiento y retroalimentación constantes por medio de las denuncias que acompaña UADY Sin Acoso.
Otro de los temas pendientes en el protocolo que hoy maneja la universidad, dijo, es que no menciona de forma explícita que deba atender las violencias que no ocurren en el espacio educativo directamente, por ejemplo, en la virtualidad u otros lugares a los que el alumnado acuda por temas escolares, culminando en la falta de atención a esto.