Género y Derechos Humanos

¿Sabes qué es la sumisión química? Un delito invisibilizado en Yucatán

La sumisión química consiste en el uso, con o sin consentimiento, de sustancias químicas como alcohol o cualquier droga, para manipular la voluntad de una persona, produciendo una incapacidad o inconsciencia que facilite las acciones delictivas.

Por Cecilia Abreu

La sumisión química está presente en Yucatán, aunque este tipo de violencia no suela nombrarse y, por lo contrario, sí se invisibilice; notando este hecho, diversas organizaciones decidieron sumar esfuerzos para realizar una campaña que lleve a tomar conciencia sobre ella para evitarla, utilizando los hashtag #ParaTiDiversión #ParaMíViolación.

Este delito, presentado principalmente en fiestas o bares, suele realizarse hasta llegar a la violación o abuso sexual, principalmente hacia mujeres, por ello, el Frente por los Derechos de las Mujeres en Yucatán, Ciencia Social Alternativa A.C/Kookay, Asociación Mexicana para el Bienestar y la Igualdad Yaxché, Centros de Integración Juvenil (CIJ), Reflexión y Acción Feminista y Alternativas en Salud y Desarrollo se unieron en la búsqueda de visibilizar y disminuir esta violencia.

Con la campaña mediante redes sociales, hacen tomar conciencia de que la sumisión química existe en Yucatán y además de los delitos sexuales, también es usada para cometer otros hechos delictivos como el robo de propiedades.

Representando al Frente por los Derechos de las Mujeres, Nancy Walker Olvera, expuso que estas violaciones están presentes en diversos contextos económicos y zonas de la ciudad, sin importar la edad, por eso encuentra importante hablar del tema, “mientras más personas se animen a visibilizarlo y a denunciarlo se podrá tener un mayor interés en estos casos”.

Además, pidió evitar la revictimización con señalamientos como si las víctimas fueran responsables de lo que les ocurrió, sensibilizando que todas las personas tienen la libertad de salir y divertirse, con la única responsabilidad de las acciones ejecutadas por sí solas y no de lo que otras les hagan.

Con esta campaña, dijo, también orientan para identificar si han sido víctimas de este delito que tiene impacto incluso en la salud mental como consecuencia de la violación o el abuso sexual.

Por su parte, Juan Canto, de la Asociación Mexicana para la Igualdad y el Bienestar Yaaxché, puntualizó que en México cada 18 segundos una mujer es víctima de violación y 300 de los casos ocurren por temas relacionados con la narcosis, es decir, la sumisión química; cifras que no contemplan los hechos que no fueron sometidos a un proceso legal, es decir, la cifra negra que en el país ronda 93.3 por ciento de los casos y en el caso de Yucatán esto asciende a 94.1 por ciento.

“Queremos visibilizar que esto no es un mito no es algo que no ocurra, es un asunto real que está normalizado que se agudiza y refuerza entre la población de nosotros los hombres […] Esta campaña no es de índole moral, tiene que ver con un asunto de violación a los derechos y que además es un delito”, sensibilizó.

Lamentó que este delito forma parte de un conjunto de violencias, también invisibilizadas, entre ellas: el abuso sexual infantil, trata de mujeres, niñas y adolescentes, entre otras.

Es necesario llamarle por su nombre, sumisión química, pues así se visibiliza este tipo de violencia que suele callarse ante la falta de atención integral a las denuncias presentadas, destacó Víctor Roa Muñoz, director del Centro de Integración Juvenil (CIJ). Por ello, continuó, con la campaña esperan nombrarla, en especial entre las juventudes que desconocen el término, logrando que sea visibilizada y contribuir, no solo a la denuncia, sino también a la disminución de este delito.

Informó que se suman a la campaña, reconociendo que uno de los medios utilizados para violar o abusar sexualmente de las mujeres son las sustancias psicoactivas para inhibir la conciencia y voluntad de las personas.

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