Emerge Vida

“Sin cenotes no hay paraíso”, exigen suspensión de Tramo 5 del Tren Maya

Por Cecilia Abreu

“El tren no solo violenta solo a un área específica, sino que violenta toda una sección que afecta kilómetros y kilómetros”,

señaló una manifestante.

Hoy, 17 de abril, alrededor de 20 personas se manifestaron en el Poder Judicial de la Federación para exigir que suspendan el Tramo 5 del Tren Maya —de Cancún a Playa del Carmen—, pues alegan que el paso de este vehículo ferroviario representa un ecocidio en la zona.

Durante la protesta, sostuvieron una manta visibilizando la construcción de este megaproyecto como un ecocidio debido a la flora y fauna que han afectado, pero también por los impactos que tendrán sobre el agua y los cenotes particularmente.

Una de las manifestantes, quien no proporcionó su nombre, opinó que los residuos de gasolina del tren acabarán por contaminar el agua de los cenotes e incluso los cultivos y animales cercanos, además de que incrementará el calor por la deforestación que implica su construcción; “si no empezamos a ver lo que estamos haciendo ahorita lo vamos a sufrir, pero no en 30 años, lo vamos a sufrir en cinco años y en 10 años vamos a decir ‘¿qué hicimos?’”.

También, José Urbina, otro de los presentes, quien interpuso el primer amparo del Tramo 5, destacó que las exigencias han provocado que “el señor presidente mandara a decir en la mañanera ‘estamos buscando al impulsor del amparo porque aparentemente vive en el extranjero y tiene casas’”, pero a pesar de esto no ha dado la cara ni abierto el diálogo, a pesar de que lo han intentado.

“No han querido dialogar, fuimos la Palacio Nacional, invitados por él, 10 especialistas y el día anterior nos cancelaron la cita cuando ya estábamos allí”, indicó.

Subrayó que lo que está ocurriendo es un ecocidio, comentario que también compartió la maifestante Patricia Godínez, quien detalló que la tala de árboles sin siquiera un ahuyentamiento previo de las especies que habitan la zona están afectando a los animales “sin piedad”; a esto, sumaron voces al unísono con consignas como: “la selva no se vende, se cuida y se defiende”, “sin cenotes no hay paraíso”, entre otras.

Además de la exigencia de la suspensión del tramo, continuó, también piden que haya estudios e inspección física del lugar para que “con bases y verdades resuelvan estos amparos”.

Un manifestante, biólogo de profesión, resaltó que el tipo de suelo kárstico está siendo vulnerado con el megaproyecto del Tren Maya y desde su visión todo el plan “está mal hecho, es ilegal, es impositivo y, sobre todo, es ecocida y lo vamos a pagar en el futuro todos y todas”.

“Estamos aquí, tenemos que actuar como sociedad hoy, no solo para nosotros aquí y ahora, sino para las futuras generaciones, para las personas que no han nacido aún, tenemos que dejarles un mundo correcto”.

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