Usar la bicicleta como medio de transporte tiene muchos beneficios, hay que elegir la ideal

Por Cecilia Abreu

En el marco del Día Mundial de la Bicicleta, celebrado el pasado 19 de abril para promover este vehículo no motorizado como un medio sustentable, asequible y con muchos beneficios para la salud, la fisioterapeuta Carmen Rosado Ojeda, maestrante en la especialidad deportiva y fundadora de Kinefilaxia, advierte la importancia de elegir la bici ideal para cada persona.

Esta elección de bicicleta, explicó, puede contribuir a respetar la anatomía del cuerpo, evitando lesiones; por eso, lo primero a definir al comprar una es para qué se va a utilizar, pues si existen de ruta, urbana, de montaña, etcétera, es precisamente porque cubren necesidades particulares.

Pero eso no es todo, pues detalló que el tamaño tiene que ser el adecuado, de forma que los pies de la persona logren asentarse en el piso, por ejemplo; y, además, al modificar la altura del sillín (debe llegar justo a la altura de la cadera cuando te paras al lado de la bici) y la posición del manubrio se permiten mejores posturas para la espalda para evitar lesiones.

La especialista, además abundó sobre las características de las bicicletas, pues éstas forman ángulos en las uniones con sus demás partes y, el triángulo que forman entre las ruedas, varían entre cada talla.

“Si eso cambia, también cambia la forma de los pedales, la altura, y eso influye mucho porque cada vez que pedaleas flexionas y estiras la rodilla y hay ciertos ángulos que pueden ser lesivos”, de ahí que destacó la importancia desde la elección al adquirir este medio amigable con el ambiente.

Llegar a la adaptación con el nuevo vehículo puede resultar en incomodidad los primeros días, en especial cuando ya tenía una bicicleta previa, sin embargo, por ningún motivo manejarla debe ocasionar dolor, expuso.

El dolor, apuntó, puede indicar alguna lesión como la pubalgia que “es una lesión muy común” y sinfín de ciclistas suelen tomar ese dolor como normal por andar en bici, pero no lo es, por ello, sugirió siempre prevenir ese o cualquier daño a la salud realizando estiramientos antes y después de ir sobre las dos ruedas.

Aunque el cuerpo esté acostumbrado a ese tipo de movimiento, necesita un aviso, dijo, puede iniciar moviendo los tobillos, rodillas y caderas; pero también cuando ya se va a descansar, estirando hasta la espalda.

“La espalda es muy importante porque las cadenas musculares y muchos músculos de las piernas se insertan en las lumbares”.

A pesar de los cuidados señalados, la fisioterapeuta encuentra en la bicicleta una ayuda al medioambiente y al propio cuerpo gracias al movimiento, “mucha gente hoy en día es sumamente sedentaria, si tienen una bici en casa yo les diría: ¡úsenla!”.

Muchas personas no quieren hacer ejercicio, reconoció, y les invitó a encontrar la forma de ser personas activas físicamente, yendo al Oxxo en bicicleta si la tienen o caminando si no. “Vas a fortalecer músculos de la pierna, espalda, ayuda mucho a la coordinación sobre todo en los niños y al equilibrio”.

Además, informó que la bici es una gran aliada del sistema cardiovascular porque se trabaja el sistema aeróbico, en especial en largas distancias. “Estás trabajando sangre, corazón, pulmones, músculos; es una vida mucho más saludable, de alguna u otra manera, si eres diabético, hipertenso o tienes osteoporosis, te está ayudando esa actividad física”.

En la actualidad, opinó, los trabajos contribuyen con el sedentarismo al estar sentados todo el día y, si el traslado al hogar es en un automóvil, eso continúa; mientras que, al ser en bicicleta, estás sentado en cierta forma, pero estás en movimiento.

“Se ha comprobado que disfrutar de los paisajes también ayuda muchísimo a la parte psicológica, poder estar despierto en tus cinco sentidos, apreciar el medio en el que estás ayuda muchísimo emocionalmente”.

Concluye que ser activo en la bicicleta, es integral, pues aportas a tu cuerpo física, psicológica y socialmente, justo como indica la Organización Mundial de la Salud (OMS) que es lo ideal.