Yucatán, lejos de garantizar la autonomía reproductiva
El estado no solo tiene una deuda en despenalizar el aborto, sino que debe garantizar la autonomía reproductiva porque es parte de los derechos humanos e implica la educación, el acceso a la salud, el derecho a la información, entre otras acciones, destacó Amelia Ojeda Sosa.
Por Líneas Emergentes
Mérida, Yucatán, 28 octubre de 2024.- La abogada Amelia Ojeda Sosa, coordinadora jurídica de UNASSE, destacó que la autonomía reproductiva es parte de los derechos humanos y garantizar su ejercicio es obligación del estado y de todas las autoridades, pero ahora se está lejos de garantizar este derecho.
En el marco del Foro Salud y Autonomía Reproductiva que se realizó en el Congreso de Yucatán, apuntó que uno de los obstáculos, por ejemplo, es el del aborto que en Yucatán no se ha despenalizado, lo que es necesario para evitar la criminalización que impide que las mujeres y personas gestantes puedan acceder a servicios de salud.
Además, dijo que los marcos normativos constitucionales obligan ya a la despenalización y también se ganó un amparo que debe acatar el Congreso, a través del que se le ordena derogar los artículos que penalizan el aborto, porque impiden el derecho a decidir de las personas y por lo tanto lo que generan es esta obstaculización y la criminalización de las mujeres y personas gestantes.
Ante este escenario, dijo que Yucatán tiene varias deudas, como garantizar que se pueda acceder a servicios de salud amigables para adolescentes, con un enfoque total de derechos humanos.
“Y en el tema de aborto no se ha eliminado del Código Penal este delito y se sigue criminalizando a las mujeres y personal sanitario que las acompaña, a pesar que desde septiembre del 2021 la Suprema Corte de Justicia de la Nación lo declaró inconstitucional y ahora con el amparo que se ha ganado y se tiene que notificar al Congreso”, expuso,
Añadió que también hay una deuda en la información que requieren las mujeres y personas con capacidad de gestar para ejercer efectivamente su autonomía reproductiva, ya sea que decidan la interrupción o llevar a termino un embarazado en las mejores condiciones, sin que haya violencia obstétrica, teniendo acceso a los servicios que requieren, que tengan la posibilidad de servicios de partería y del acompañamiento de las personas de su confianza.
Ojeda Sosa expuso que la autonomía reproductiva requiere la protección de muchos derechos, el derecho a la educación, información para tomar decisiones desde la escuela para una educación integral, derecho a la información clara y veraz, oportuna, en el momento que se necesite y libre de mitos, tabúes y estereotipos.
Además, el derecho a la salud, acceso a metodología anticonceptiva o técnicas de reproducción asistida. También, el tema de la accesibilidad a los servicios de salud, que se hagan los ajustes razonables alguna discapacidad, motriz, cognitiva, visual, así como el tema de la lengua ya que no todas las personas hablan solo español o maya, sino otras lenguas.